jueves 19 diciembre 2024, 10:57 AM Por: Diego San Román
Desde ideas revolucionarias, como la celebración de los Juegos Olímpicos en cinco ciudades de cinco continentes, a propuestas conservadoras que se limitan a subrayar "el poder transformador del deporte": así de amplio es el abanico de ideas con las que se enfrentarán en marzo de 2025 los siete candidatos a la presidencia del COI, que presentaron este jueves sus programas.
Entre ellos figura el español Juan Antonio Samaranch. La lista de aspirantes la completan el británico Sebastian Coe, el francés David Lappartient, el japonés Morinori Watanabe, el jordano Feisal al Hussein, el sueco-británico Johan Eliasch y la zimbabuense Kirsty Coventry.
El ganador de las elecciones sucederá al alemán Thomas Bach y se convertirá en el décimo presidente -todos hombres- del COI, entidad fundada en 1894 y responsable de la organización de la mayor cita deportiva universal, los Juegos Olímpicos.
El programa de los siete candidatos presenta coincidencias en asuntos básicos como la necesidad de mantener la neutralidad e independencia del Movimiento Olímpico, la conveniencia de dar más voz a los deportistas, el compromiso con la lucha contra el dopaje y a favor de la igualdad, la sostenibilidad y los valores olímpicos y la idoneidad de aumentar los ingresos.
Pero también coinciden expresamente la mayor parte de ellos en su deseo de devolver a la asamblea olímpica (Sesión) la decisión sobre la sede de los Juegos Olímpicos, preferentemente con una elección entre varias candidatas. Actualmente la Comisión Ejecutiva elige una ciudad y el pleno se limita a votar para ratificarla.
"Los miembros deben decidir la selección de la ciudad anfitriona. La Comisión de Futuras Sedes deberá seguir prestando ayudar a cada candidato para desarrollar el mejor proyecto posible. La lista definitiva de candidatas idónea debe ser sometida a la opinión de la Sesión", sostiene Samaranch.
También coinciden varios en elevar la edad de jubilación de los miembros del COI a los 75 años, frente a los 70 que impera actualmente.
Hay un acuerdo casi unánime respecto a la participación olímpica de las deportistas transgénero, en el sentido de proteger el deporte femenino.
Johan Eliash, presidente de la Federación de Esquí y Snowboard, es quien lo es expresa de forma más nítida: "Hay que volver a los hechos biológicos para asegurar la justicia para todas (las atletas), asegurar que solo aquellas que nacieron mujeres puedan competir en el deporte femenino".
En cuanto a los premios económicos para los deportistas olímpicos, Sebastian Coe (presidente de World Athletics) es el más claramente partidario: "Desarrollaré programas que les permitan compartir los ingresos comerciales que ayudan a generar, dándoles poder como socios, no sólo como participantes".
Cambiar las fechas de los Juegos para que más ciudades puedan organizarlos pese a las consecuencias de la crisis climática, como subraya Al Hussein, es otra propuestas en la que coinciden varios de los candidatos.
El francés David Lappartient, presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI) y del Comité Olímpico Francés, se compromete a lograr la paridad en el COI para 2036 para mejorar el actual 41 % de mujeres en su asamblea.
La única mujer candidata, la exnadadora olímpica Coventry (7 medalllas), ministra de Deportes en su país, presenta un programa ambiguo, de continuidad con la actual situación del Movimiento Olímpico y con pocas propuestas concretas salvo la contención del crecimiento del programa deportivo de los Juegos.
Watanabe, presidente de la Federación Internacional de Gimnasia, rompe la baraja con dos ideas completamente novedosas: la celebración de los Juegos de forma simultánea en cinco ciudades de cinco continentes, cada una a cargo de diez deportes, y la transformación del COI en un organismo bicameral en cuya Cámara de Representantes estarían todos los presidentes de los comités olímpicos nacionales y de las federaciones internacionales.
EFE/Foto: EFE