Mohamed Salah estalló tras el empate del Liverpool, asegurando que ya no tiene relación con Arne Slot y dejando abierta la posibilidad de no volver al club después de la Copa Africana. El egipcio encadenó su tercer partido consecutivo como suplente y no disputó ni un minuto ante el Leeds, situación que considera injusta después de lo que ha aportado al equipo.
Salah afirmó sentirse utilizado como “chivo expiatorio” y reveló que el club le hizo promesas en verano que no se han cumplido. Señaló que “alguien no lo quiere” en el Liverpool y que su relación con Slot “ha desaparecido de un día para otro”, pese a que antes era buena.
El delantero también insinuó que el duelo contra el Brighton podría ser una despedida antes de viajar a la Copa África el 15 de diciembre, pues no sabe si volverá a vestir la camiseta ‘red’. Incluso dejó entrever que su salida del club es una posibilidad real, aunque evitó hablar de ofertas de Arabia Saudita.
Molesto por las críticas y las comparaciones, Salah recordó sus números: máximo goleador y asistente de la temporada pasada, además de cuarto en el Balón de Oro. Aun así, lamentó ser el primero al que se pide enviar al banquillo cuando no marca, algo que, según él, no ocurre con otros delanteros de la élite.
con información base de EFE/ Foto: EFE